El deserto del Namib

El parque Namib-Naukluft contiene uno de los desiertos mas antiguos de la tierra. Este mar de tierra, piedras y arena, que ocupa la parte central del país, entre el Océano Atlántico y Windhoek, contiene en su interior gigantescas dunas color albaricoque que llegan a la altura de 300 metros: las maravillosas dunas de Sossusvlei, quizá el destino principal de Namibia. Entre las dunas del Namib a Sossusvlei se abre una cuenca perfectamente redonda, plana y lisa, de un blanco espectacular, fondo  de un antiguo lago ya seco, rodeado de arboles muertos.  Al variar las condiciones de luz, los colores y las sombras dan vida a un espectáculo inolvidable asociado al sentido de majestuosidad proporcionado por los inmensos espacios y del silencio, roto solo por el soplar del viento.

El desierto del Namib es conocido también como “el desierto que vive”; con un poco de suerte se pueden avistar manadas de antílopes, cebras u orix adaptados a vivir en este lugar inhóspito.

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